La selección inca viene de una final de Copa América en la que fue derrotada por Brasil 3-1, siendo su primera final del torneo perdida. ¿Qué debe hacer el equipo de Gareca para repetir la hazaña conseguida?
Actualmente Perú marcha penúltima en las eliminatorias con tan solo un punto conseguido en 4 partidos, registrando 10 goles encajados y solo consiguiendo anotar 4 tantos. El juego defensivo se ha visto afectado, pero la poca generación en ofensiva también ha afectado a la selección peruana, teniendo solo 1.3 grandes ocasiones creadas por partido, y fallando en promedio 1.0 por cada 90 minutos jugados.
En defensa, este tipo de desatenciones dentro del área, con un jugador contrario entrando y recibiendo en solitario, hacen que las generaciones de peligro rival sean más repetitivas y ocasionen más peligro en el propio arco.
A pesar de que las líneas no están tan separadas, se descuidan las marcas y los jugadores rivales pueden recibir entre líneas, con espacios para pensar y crear jugadas de peligro. Los mediocampistas agarran a los rivales estando de espaldas.
En la misma jugada donde el mediocampista rival recibe entre líneas, el delantero (Lautaro Martínez en este caso), se abre un espacio entre ambos centrales, aprovechando la libertad y ligereza a la hora del marcaje, para así correr al espacio esperando la habilitación. La jugada terminó en gol.
Nuevamente en esta jugada se ve los espacios que tienen los jugadores rivales, incluso dentro del área, para tomar ventajas y correr a los espacios dejados por el equipo en esa fase defensiva. En esta jugada Vidal remata desde una zona de impacto con total libertad, mientras que dentro del área hasta tres jugadores entran con espacios para crear peligros.
JUGADOR CLAVE
Renato Tapia, el mediocampista del Celta de Vigo, es uno de los jugadores que más puede aportar en el equilibrio defensivo, especialmente en las transiciones.
Tapia promedia 42.7 toques por partido, involucrándose mucho en el juego de la selección, con un 74% de efectividad en los pases completados. Además de eso, promedia 1.7 intercepciones y 3.0 entradas por partido, teniendo un dominio en la mitad de la cancha para evitar la fluidez en el juego.
Uno de los datos que no lo favorece es que tiene solo un 495 de efectividad en duelos totales ganados, además de que es regateado 2.7 veces por encuentro, en cuanto a eliminatorias se refiere, mostrando la debilidad en el mediocampo de la selección inca.
Perú debe buscar una solidez mayor a la ya mostrada en cuanto a defensa se refiere. Los dirigidos por Gareca tienen dos penaltis concebidos en los 4 primeros partidos por eliminatorias, mostrando también las entradas a destiempo por la desorganización en defensa o falta de presión al marcar.
En cuanto a la ofensiva, los peruanos buscan mayor efectividad a la hora de definir. Han anotado 2 goles en 16 oportunidades dentro del área chica, y 2 goles de 19 oportunidades fuera del área chica. La ausencia de Paolo Guerrero ha provocado que André Carrillo, extremo derecho que hace vida en el fútbol de Arabia Saudita, tome la batuta de goleador del equipo en la actualidad, con 3 de los 4 tantos anotados en eliminatoria.
Ser más efectivos a la hora de definir y con una marca más férrea es lo que debe buscar Perú para esta nueva Copa América si quiere repetir su actuación en la pasada edición.
