En febrero, se negó a salir sustituido antes de la tanda de penales frente al Manchester City y su equipo terminó perdiendo la Carabao Cup. La semana siguiente, Sarri lo mandó al banquillo y el #Chelsea le impuso una semana sin sueldo como castigo por su acción.
Hoy, cuando su club estaba abajo nuevamente en una tanda de penales, sacó la capa de héroe y atajó dos tiros para meter a los ‘blues’ en una nueva final y ganarse el perdón de su entrenador.
El fútbol siempre da revancha, y Kepa vivió en Stamford Bridge, frente a su afición, una noche de reivindicación.