La selección de Italia ha demostrado un juego ofensivo con intensidad y claridad, pero sin descuidar su típico modelo defensivo que ya es una marca del país. Pero, ¿cómo han logrado ser ese equipo potente en ataque y sólido en defensa?
Una de las razones por la cual el equipo de Roberto Mancini ha mantenido dicha solidez en defensa, es mantener el orden y una presión rápida tras pérdida de balón. Italia promedia 9.7 entradas y 11.7 intercepciones por partido en toda la Euro 2020.
Italia siempre busca tener superioridad en todos los sectores del terreno, bien sea con o sin balón. Al perder la pelota, intenta presionar rápidamente para evitar el juego progresivo del rival en toda la cancha. Al superar esa presión, de igual manera la defensa no queda desguarnecida por el buen repliegue y el orden de cada una de las líneas.
Mancini logró crear un equipo sumamente ordenado a nivel táctico, haciendo que presionen, ataquen o defiendan todas las líneas en un solo bloque, facilitando así todas las tareas con mucho sacrificio.
Otra característica de esta azzurri es cómo en ataque los laterales despegan para no solo generar volumen, sino que también son incisivos y crean oportunidades en campo contrario. No son laterales que solo se quedan en la banda, sino que pueden terminar pasando como unos internos. Sin embargo, la baja de Spinazzola puede afectar el juego de Italia por la banda izquierda, donde el suplente Emerson quizás no sea el mejor reemplazante para el trabajo que realizaba el jugador de la Roma.
Siempre presentes en ataque en campo contrario, creando las oportunidades y logrando hasta definir las jugadas, apoyándose en un repliegue en defensa. Orden y decisión.
Además de eso, los movimientos de los laterales permiten que los extremos puedan intercambiar posiciones con ellos, dándoles más libertad en esa zona de ataque, ingresando más cerrados o quedarse en un costado.
Por otro lado, otra libertad fundamental en este equipo es cómo los internos pueden despegar también hasta el punto de finalizar en el área para definir y/o crear jugadas de peligro. Siempre buscan los espacios en la defensa rival.
Italia ha tenido en todo el torneo 108 disparos, con un xG (expectativa de gol) del 0.09 por cada disparo, dando un total de 1.68 xG por cada 90 minutos disputados. Es un equipo que ataca mucho cuando tiene la oportunidad, y que siempre termina finalizando todas las jugadas. Sin embargo, busca la agresividad y la rapidez en defensa para mantener el orden y su fortaleza en el arco.
Por el lado de Inglaterra, la selección de Gareth Southgate ha dejado dudas por su poco vistoso fútbol, pero en realidad la selección inglesa ha sido uno de los equipos más sólidos en cuanto a defensa se refiere en todo el torneo, atacando en momentos puntuales y haciendo daño en el arco rival cuando lo necesita.
En ataque la piza fundamental es Harry Kane. La versatilidad y los movimientos del delantero inglés permiten que, aparte de finalizador en el área, la creación lejos de su posición natural sea determinante en un equipo que deja de tener referentes en ataque y así crear confusión en la defensa rival.
La movilidad de Harry Kane permite que el ataque inglés sea con muchas variantes, aprovechando también la calidad de sus jugadores, donde todos pueden tener la posibilidad de definir. El delantero del Tottenham con su versatilidad ayuda y comanda las acciones ofensivas, pero también la inteligencia y la calidad de jugadores como Mount, Saka, Sterling, Grealish, entre otros, pueden darle la libertad necesaria y terminan pisando el área con determinación.
En ataque, los ingleses han tenido solo 58 disparos, casi menos de la mitad que Italia. Sin embargo, tiene un xG (expectativa de gol) del 0.17 por cada disparo y en total de un 1.60 xG por cada 90 minutos.
Otra cosa de la solidez de este equipo se ve en línea por línea. Por ejemplo, la salida con el balón es con superioridad numérica y buenas referencias siempre.
Una vez ya más adelantado en campo rival, uno de los contenciones (Phillips) se suelta más al ataque y Rice se interna entre los centrales para darle más libertad a los laterales, especialmente a Kyle Walker para que vaya al ataque.
Ya en defensa, la agresividad y la fortaleza de los ingleses se impone. Siempre están con superioridad numérica y no permiten jugadas progresivas. Por esa razón, Inglaterra solo ha encajado un gol en toda la Eurocopa, registrando 9.2 intercepciones y 10.3 entradas por partido.
Italia e Inglaterra son equipos similares en cuestión defensa, siendo las selecciones con mejores números defensivos. Los de Southgate tienen un xG en contra del 0.60, mientras que los de Mancini tienen un 0.89.
Sin duda alguna la final se definirá en las pizarras, con unas férreas defensas y un juego muy agresivo de lado y lado, pero especialmente táctico, donde cualquiera puede obtener el merecido título.