Las supersticiones a veces pueden llegar al extremo, una viva muestra de eso es la historia de Jack Grealish, el ‘10’ del Aston Villa, club que derrotó hoy 2-1 al Derby County y consiguió el ascenso a la Premier League.
El capitán del equipo obtuvo todas las miradas durante el partido debido a que jugó con sus botines de la suerte, un par de tacos que estaban completamente rotos.
«Volví de una lesión y obviamente eran así. Obtuve algunos goles y puse unas asistencias y pensé que estas eran mis botas de la suerte», comentó el jugador al finalizar el partido.
Y tú, ¿tienes alguna cábala antes de los partidos?